La llegada de los Tres Reyes Magos

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Los regalos de reyes están presentes en uno de los momentos más esperados por los niños y no tan niños. Todos los miembros de la familia tienen ganas de que llegue el esperado día de Reyes, para ver qué van a recibir como regalo.

En las semanas previas a las vacaciones de Navidad, los niños y las niñas de nuestro país comienzan a escribir sus cartas a sus majestades de Orientes, es decir, a los Reyes Magos, poniendo en ellas todo lo que quieren recibir el esperado día.

En muchos centros comerciales o lugares con comercio de las ciudades y los pueblos, se instalan numerosos sitios donde los niños pueden depositar sus cartas. En la mayoría de ocasiones, los Tres  Reyes Magos también hace acto de presencia, pudiendo los niños y las niñas sentarse en sus rodillas y decirles aquellas cosas que desean recibir. Muchas ocasiones son sus pajes reales los que están en los centros comerciales o tiendas, puesto que los verdaderos Reyes Magos tienen mucho trabajo estos días. Los padres suelen llevar a sus hijos y a sus hijas a ver a los Reyes Magos y, tras esperar una cola bastante larga pues son muy frecuentados, los niños y las niñas tendrán la ocasión de estar unos minutos con sus ídolos y hacerse una foto con ellos.

El día cinco de enero, ya bien entrada la tarde, es típico en todas las ciudades españolas, así como en los pueblos, realizar la famosa cabalgata de los Reyes Magos. En esta ocasión, los niños y las niñas podrán volver a ver a sus ídolos, pocas horas antes de que éstos entreguen los regalos en sus casas. Los Reyes Magos aparecen montados en deslumbrantes carrozas, rodeados de sus pajes, y lanzan chucherías, caramelos, golosinas y algunos juguetes pequeños a los niños y las niñas que van a verlos. Una avalancha de gente se sitúa en las primeras filas, para poder contemplar a sus majestades de Oriente.

Esa noche del cinco de enero, los niños están nerviosos, pues saben que los Reyes Magos harán acto de aparición a mitad de la noche, para dejarles los regalos. Por eso, los padres les dicen que se acuesten pronto y que no se despierten hasta por la mañana. Los niños dejan sus zapatos o zapatillas de casa, para que los Reyes Magos les dejen caramelos y les sitúen ahí los regalos.
El día seis, por la mañana, los niños se levantan entusiasmados, ya que tienen ganas de recibir los regalos de reyes. Los abren con ganas y los disfrutan con mucha ilusión. Los mayores también tenemos nuestros regalos, gozando con aquello que nos han regalado nuestros seres queridos. Luego muchos niños van a casa de sus abuelas y allí también han dejado los Reyes Magos algunos regalos. Son momentos de felicidad y alegría, pues los niños son los auténticos protagonistas.

Después de abrir todos los regalos y disfrutarlos durante la mañana llega la hora al mediodía de realizar la tradicional comida de Reyes, con deliciosos manjares, cuyo postre consiste en el tradicional roscón de Reyes, un rico dulce que todos tomamos.

El día de Reyes es una gozada para todos.